¿ Mediterráneo?

Quizá porque mi niñez
sigue jugando en tu playa,
y escondido tras las cañas

duerme mi primer amor,
llevo tu luz y tu olor
por donde quiera que vaya,

y amontonado en tu arena
guardo amor, juegos y penas.

Yo,

que en la piel tengo el sabor
amargo del llanto eterno,
que han vertido en ti cien pueblos

de Algeciras a Estambul,
para que pintes de azul
sus largas noches de invierno.

A fuerza de desventuras,
tu alma es profunda y oscura.

A tus atardeceres rojos
se acostumbraron mis ojos
como el recodo al camino...

Soy cantor, soy embustero,
me gusta el juego y el vino,
Tengo alma de marinero...

¿Qué le voy a hacer, si yo
nací en el Mediterráneo?

Y te acercas, y te vas
después de besar mi aldea.
Jugando con la marea

te vas, pensando en volver.
Eres como una mujer
perfumadita de brea

que se añora y que se quiere
que se conoce y se teme.

Ay...

si un día para mi mal
viene a buscarme la parca.
Empujad al mar mi barca

con un levante otoñal
y dejad que el temporal
desguace sus alas blancas.

Y a mí enterradme sin duelo
entre la playa y el cielo...

En la ladera de un monte,
más alto que el horizonte.
Quiero tener buena vista.

Mi cuerpo será camino,
le daré verde a los pinos
y amarillo a la genista...

Cerca del mar. Porque yo
nací en el Mediterráneo...


Una de las mejores canciones que se han compuesto en España en los últimos tiempos.
Dicen que Mediterráneo significa "el mar entre las tierras", y es cierto, excepto en Gibraltar.
Es cierto que en sus orillas hace milenios que florecieron las civilizaciones de las cuales se alimenta la nuestra.
Griegos, fenicios y sobre todo romanos extendieron su cultura por todas sus costas.
Los romanos le llamaron Mare Nostrum y era verdad, pues su imperio y su "modus vivendi" alcanzaron la totalidad de sus costas, como diria Serrat, de Algeciras a Estambul se hablaba latin.
Pero no es para explicar la conocida historia del Mediterráneo, lo que me ha llevado a escribir esto; lo que me ha preocupado no es su brillante pasado de cultura y desarrollo, sino un futuro muy negro.
He pasado unos días aquí:



En la séptima planta de un edificio de VEINTINUEVE plantas, que casualmente no era el único, sino que era uno de los muchos que proliferaban en esa ciudad.
La verdad es que me he sentido incomodo, puede ser que mi mente "provinciana" no asimile estar rodeado de estas moles de hormigón.
También pudiera ser que la lucha por un metro cuadrado de playa "me ponga del hígado" y que andar yo solo, con mis tres hijos, por la playa vigilando que no se pierdan, me siente mal; pero he ido a otros mares así y no me ha ocurrido esto.
Pudiera ser que no se organice la playa con pasillos de acceso al mar y que solo se organice las hamacas de cuatro euros día, más sombrilla de otros cuatro, como elemento "rentabilizador" del litoral, me parezca vergonzoso; pues son necesarios pasillos para no tener que pasar por el bosque de sombrillas y toallas sin molestar.
También me sienta mal, que vaya a comer a un restaurante y me cobren dos euros por una botella de medio litro de agua y como resulta que tengo tres hijos pague SEIS EUROS por tres botellas de medio litro o que me cobren CUATRO euros por un flan "DHUL" que ellos llamaban de la casa, todo esto en un restaurante de "medio pelo" y al que para más recochineo, le tuve que pedir la factura (pues no me la daba). Todo esto no en primera linea, ni en segunda, ni en tercera linea de playa sino en la ciudad, en una calle cualquiera. Los aseos,tenias que girarte para cerrar la puerta, mantel de papel y servilleta de papel, de la comida mejor ni hablar; del pan que no pedí, me cobraron seis euros.
Pero es moneda habitual allí, pues la excepción la tuve en un restaurante, casualmente el mejor en apariencia y donde ya iba con la idea de que me van a "fusilar"; alli fue el más caro, pero sin embargo me cobraron el agua de forma natural 2 euros el litro y medio, servilleta de tela, mantel de tela, servicio rápido y comida excepcional. En un computo total me parecio el más barato, lastima que fue la última cena.
Un día, hablando con el del bar de abajo, me contó que estaban en crisis y tal... que este año no venia la gente, que no hacían caja, etc, etc, etc...
Miraba alrededor y solo veía hormigón, hoteles de diez plantas tapados por otros de treinta, bloques y más bloques de hormigón, hacinamiento de personas y coches...
Pensé, ¿que futuro le queda a esta cuidad donde se grabo el anuncio de la ONCE?, y no le vi ninguno.
La formula sol y playa, hacinados como animales sin orden ni concierto, bares exclusivos para los hijos de la Gran Bretaña y un total desprecio por la calidad en el servicio. ¿Quien va a pagar por esto? Yo desde luego no vuelvo.
Un día cogi el coche, monte a mis hijos y me fui a buscar una zona donde respirar MEDITERRANEO, donde sincronizarme como lo hago con el Cantábrico o el Atlántico; donde explicarles a mis hijos, que ese mar era por donde los griegos habían llegado a la península y le dieron el nombre de Iberia.
También quería explicarles que luego vinieron los romanos y que adoptaron el nombre que le dieron los intrépidos fenicios que la llamaron Hispania, que es "tierra de conejos". Que ese mar era un mar de Cultura e Historia y que mucho de lo que hacemos ahora, es consecuencia de los hechos que ocurrieron a sus orillas.
Pero no encontré en todo el día un lugar apropiado, todo era hormigón y urbanizaciones; así que no les conté la Historia del Mediterráneo, pues no encontré la inspiración que buscaba.
Entonces maldije a los políticos corruptos, que han permitido este desmán, esta violación de las orillas y las aguas del mar más Histórico del Mundo.
Pense, la tierra de conejos es ahora la tierra de ladrones, pero ya no queda nada que robar, hemos desperdiciado un bien precioso, hemos sido imbéciles y egoístas; inútilmente egoístas, como la persona que por no comprar una lavadora, lava a mano y no se da cuenta de gasta más agua caliente y más tiempo.

Cuando dragamos sus fondos, para mantener unas enormes playas que llenamos de miles de personas, que metemos en miles de casas, que contaminan millones de litros, estamos desestabilizando el sistema.

Estamos derrochando el futuro de nuestros hijos, estamos atacando de muerte a nuestro mar; pues yo siendo de Burgos (celtíbero), sentía que el Mediterráneo también era una parte de mi Historia.

El idioma que hablo vino a través de él, mis compatriotas viven en sus orillas y una parte de mi persona es hija suya, no me he sentido identificado....

¿Quien ha permitido tal proliferación de bares de medio pelo, sin instalaciones adecuadas y sin formación?

¿Quien ha permitido esos bosques de edificios?, que más que desafiar al cielo desafían al buen gusto y a la Vida?.

¿Quien permite edificar en playas y costas que son de todos?.

¿Quien nos esta robando nuestro pasado e hipotecando nuestro futuro?.

Vi en una lonja de pescado en Calpe, unas pescadillas que eran ridículas por su tamaño, estuve hablando con unos pescadores y me dijeron que este año la pesca también estaba muy mal.

¿De que se extrañan? esas pescadillas si las dejan crecer, se multiplicarían y ganarían peso, así se han comido su futuro.

Que rabia y que impotencia he sentido y sobre todo, me he preguntado ¿nadie ve esto?, ¿nadie hace nada?. Estoy seguro que estarán muy ocupados poniendo Alicante y Alacant por duplicado en todas las señales. Mecagoensumadre....

Que Fortuna confunda a los responsables de esto, pues cómplices somos todos de alguna manera.