miércoles, 7 de agosto de 2019

Estúpidos y estúpidas sin fronteras.

Siempre me ha fascinado la Estupidez. La mía, por supuesto; y eso es una causa suficientemente grande de ansiedad.

Pero las cosas se vuelven mucho peores cuando uno tiene la oportunidad de encontrar como la Gente Grande toma Decisiones Grandes.

Generalmente tendemos a culpar a la perversidad intencional, a la malicia astuta, la megalomanía, etc. de las malas decisiones. Están allí, por supuesto; pero cualquier estudio cuidadoso de la historia, o de los eventos actuales, lleva a la invariable conclusión que la fuente más grande de los terribles errores es la pura estupidez. Cuando se combina con otros factores (como sucede a menudo) los resultados pueden ser devastadores.

Uno de los muchos ejemplos de estupidez es que la intriga y el poder de la manipulación bélica se llaman "maquiavélicos". Obviamente nadie ha leído los libros de Maquiavelo, y eso no es lo que el viejo Niccolò quiso dar a entender.

Otra cosa que me sorprende (¿o no?) es el escaso material dedicado al estudio de un tema tan importante. Existen departamentos universitarios para analizar las complejidades matemáticas de los movimientos de las hormigas del Amazonas, o la historia medieval de la isla de Perima; pero nunca he sabido de una Fundación o Consejo Consultivo que apoye los estudios de la Estupidología.

He encontrado muy pocos libros buenos sobre el tema. Uno que leí cuando era adolescente, y que nunca olvidé, se llama Una Breve Introducción a la Historia de la Estupidez Humana de Walter B. Pitkin de la Universidad de Columbia, publicado en 1934. Lo encontré por accidente hace muchos años cuando estaba viendo los anaqueles de libros de mi mamá; y muy a mi delicia, cuando fuí a su casa ayer y lo busqué, todavía estaba allí. Así de antiguo como es, todavía es un muy buen libro. Algunas de las observaciones del Profesor Pitkin aparecen extraordinariamente correctas sesenta años después.

Pero... ¿porqué llamaría el autor "una breve introducción" a un libro de 300 páginas?

Al final del libro, dice: Epílogo: ahora estamos listos para empezar a estudiar la Historia de la Estupidez. Nada sigue.

El Profesor Pitkin fué un hombre muy sensato. Sabía que toda una vida era muy poco tiempo para cubrir aún un fragmento de tan vasto tema. Así que publicó la Introducción, y eso fué todo.

Pitkin estaba muy consciente de la carencia de trabajos previos en el campo. El tenía a su disposición un equipo de investigadores a quienes puso a realizar pesquisas en los archivos de la Biblioteca Central de Nueva York. Nada encontraron. Según Pitkin, había solamente dos libros sobre la materia: Aus der Geschite der menschlichen Dummheit de Max Kemmerich, y Über Dummheit de Lewenfeld. Desafortunadamente no entiendo alemán, aunque "Dummheit " me parece suficientemente claro; y creo que Kemmerich y Lewenfeld debieron de haber tenido una abundancia especial de material para sus estudios, considerando lo que sucedió en Alemania en 1933 y en los años siguientes.

En la opinión de Pitkin, cuatro de cada cinco gentes son lo suficientemente estúpidos para ser llamados "estúpidos". Eso equivaldría a quinientos millones de gentes cuando escribió el libro; ahora son más de cuatro mil millones. Esto por si mismo es bastante estúpido.

El observó que uno de los problemas de la Estupidez es que nadie tiene una definición realmente buena de lo que es. De hecho los genios son a menudo considerados estúpidos por una mayoría estúpida (aunque nadie tiene tampoco una buena definición de genio). Pero la estupidez definitivamente se encuentra allí, y hay mucho más de lo que nuestras pesadillas mas desbordadas pudieran sugerir. De hecho domina al mundo --lo cual es muy claramente comprobado por la forma en que se gobierna al mundo.

Pero alguien, cincuenta años después, llegó con una definición bastante interesante. Su nombre es Carlo M. Cipolla quien es Profesor Emérito de Historia Económica en Berkeley. Todos sus libros se han publicado en inglés, excepto dos. El primero fué publicado por "Il Mulino" en Bolonia en 1988.

En ese libro hay un pequeño ensayo intitulado Las Leyes Básicas de la Estupidez Humana, que puede ser lo mejor que se ha escrito sobre la materia.

Aquí siguen las Cinco Leyes de la Estupidez, según Carlo Cipolla:

Primera Ley

Siempre subestimamos el número de gente estúpida.

Esto no es tan obvio como parece, dice Cipolla, porque:

a. Gentes que habíamos pensado como racionales e inteligentes repentinamente resultan ser estúpidas sin lugar a dudas.

y

b. Día tras día nosotros estamos afectados en cualquier cosa que hagamos por gente estúpida quienes invariablemente se aparecen en los lugares menos apropiados.

El también observa que es imposible establecer un porcentaje, ya que cualquier número que escojamos será demasiado pequeño.

Segunda Ley

La probabilidad de que una persona sea estúpida es independiente de cualquier otra característica de la persona..

Si estudiamos la frecuencia de la estupidez en las gentes que llegan a limpiar los salones de clase después de que se han ido los alumnos y los maestros, encontraremos que es mucho más alta de lo que esperábamos. Podríamos suponer que está relacionada al bajo nivel de educación, o al hecho de que la gente no estúpida tiene mejores oportunidades de conseguir buenos trabajos. Pero cuando analizamos a los estudiantes o a los profesores universitarios (o, añadiría yo, a los programadores de computadoras) la distribución es exactamente la misma.

Las militantes feministas pueden encenderse, dice Cipolla, pero el factor estupidez es el mismo en ambos géneros (o en tantos géneros o sexos como usted decida considerar). Ninguna diferencia en el factor épsilon [estupidez], siguiendo a Cipolla, se puede encontrar por raza, condición étnica, educación, etcétera.

Tercera Ley (la de Oro)

Una persona estúpida es alguien que ocasiona daño a otra persona, o a un grupo de gentes, sin conseguir ventajas para ella misma --o aun resultando dañada.

(Regresaremos a esto, porque es el concepto central de la Teoría de Cipolla)

Cuarta Ley

La gente no estúpida siempre subestima el poder de causar daño de la gente estúpida. Constantemente se les olvida que en cualquier momento, y bajo cualquier circunstancia, el asociarse con gente estúpida invariablemente constituye un error costoso.

Esto sugeriría (diría yo) que la gente no estúpida es un poco estúpida --pero regresaré a este punto al final.

Quinta Ley

Una persona estúpida es la persona más peligrosa que puede existir.

Esta es probablemente la más ampliamente entendida de las Leyes, si bien solamente porque es del conocimiento común que las gentes inteligentes, sin importar lo hostiles que puedan ser, son predecibles, mientras que las gentes estúpidas no lo son. Además, su corolario básico:

Una persona estúpida es más peligrosa que un bandido, nos conduce a la parte medular de la Teoría de Cipolla. Existen cuatro tipos de gente, dice, dependiendo de su comportamiento en una transacción:

Desgraciado: Alguien cuyas acciones tienden a generar auto daño, pero que también crean ventajas para alguien más.
Inteligente: Alguien cuyas acciones tienden a generarle ventajas, 
al igual que ventajas para otros.
Bandido: Alguien cuyas acciones tienden a generarle ventajas, 
al mismo tiempo que ocasionan daños a otros.
Estúpido:Ya tenemos esta definición en la Tercera Ley.

El original aquí.

Yo añadiría a esto una sexta LEY, Estúpidos y estúpidas son independientes de su lugar de nacimiento, (Estúpidos y estúpidas sin fronteras), así, podemos encontrarnos idiotas en todas las partes del mundo, y haber nacido en un lugar u otro, no exime o atenúa la estupidez a nadie. Esta Ley debiera estudiarse en todas las escuelas como  medicina contra algunos que piensan que por ser de un sitio u otro son superiores. Junto con el componente racial, que demuestra sin un ápice de duda que estúpidos hay en todas las razas y que ninguna se encuentra libre de esta tara... Y no nos olvidemos de lo que dice  Livraghi a la Primera Ley de Cipolla

"En cada uno de nosotros hay un factor de estupidez que siempre es más grande de lo que suponemos."


Que Fortuna nos amortigüe la estupidez.
                   

14 comentarios:

  1. De verdad que si, siempre es más grande de lo suponemos... mucho más, pero qué le vamos a hacer, con Cipolla o sin Cipolla, hay que encontrarse con uno mismo y con otros y aceptarlo :D aunque cueste eh..

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  2. Cipolla es muy bueno, tengo el libro en pdf.

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  3. Seguro que clásicos griegos y romanos ya disertaron, y con acierto, sobre la estupidez, como sobre tantas actitudes y comportamientos que nos sacuden desde el principio de los tiempos.

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  4. Me ha encantado. Es todo un tratado sobre la estupidez. Muy interesante. Un beso

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  5. Gemma, personalmente, y solo es una opinión, pienso que una de las causas más frecuentes de la estupidez es la inseguridad en lo que uno hace o en lo que pensaran los demás de lo que hace. Este miedo hace que gente con bastantes capacidades llegue a hacer verdaderas estupideces. En mi caso yo ñlas estupideces las hago a conciencia, jajajaja

    Un saludo

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    1. Yo creo que las estupideces precisamente las cometen las personas que son demasiado confiables seguras de sí mismas y decididas, estas cualidades dan un margen grandísimo a la estupidez porque cuanto más haces más margen de error tienes, si eres inteligente habrá sido una experiencia enriquecedora pero si eres necio o tonto la estupidez no produce nada residual de provecho. Lo que se produce inconscientemente es mucho más interesante para mi que lo que se produce en plena conciencia. Lo no premeditado es un camino que demanda reflexiones lo premeditado no, ya están hechas.

      Saludos.

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  6. FRancesc, por lo menos hace pensar, que no es poco en estos tiempos de 300 caracteres... me parece a mi...
    Un saludo

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  7. Fackel, lo desconozco, serian conscientes de ello, pero no conozco ninguna obra sobre ello, solo frases sueltas como alguna de Ciceron:

    "Cuiusvis hominis est errare, nullius nisi insipientis in errore perseverare"
    Cualquier persona puede errar, pero solo el necio persevera en sus errores...

    Aunque Voltaire siglos más tarde también dijo una que resume bastante bien la estupidez:

    "La idiotez es una enfermedad extraordinaria, no es el enfermo el que sufre por ella, sino los demás.”

    Un saludo

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  8. Buenas Adelina, pues si y mira que es dificil definir algo que siendo tan intangible provoca tanto daño, es como un virus...

    Un saludo

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  9. https://www.youtube.com/watch?v=L7eyMZomtFw

    Saludos

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  10. Gemma, creo que hay dos personas decididas muy diferentes, los que toman la decisión de forma razonada y consciente y que, ademas, saben apechugar con lo que hacen y los estupidos decididos, que ni razonan, ni son conscientes y que cuando se equivocan echan la culpa a todo el mundo menos a ellos.. CReo que hay una diferencia, grande, muy grande... Por lo demás separar lo consciente de lo inconsciente no lo veo yo muy fácil, donde acaba uno y empieza lo otro?...
    Un saludo

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  11. Doctor Krapp, muy bueno el vídeo, muy bueno...
    Un saludo...

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  12. La respuesta a tu pregunta está en la entrada de arriba, la inconsciencia es olvidar la historia o en el contexto que yo lo decía, olvidar lo aprendido y sufrido. Errar dos veces, tres, cuatro eso es inconsciencia eso es negligencia mental y espiritual. Claro que lo separo...

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  13. Por lo demás estoy muy de acuerdo con tu respuesta, la diferencia entre unos y otros es abismal para mí también.

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Piensa como piensan los sabios, más habla como habla la gente sencilla. Aristoteles (384 AC-322 AC). Filósofo griego.

Antonio Gaitán Perabad

Don   Antonio Gaitán Perabad de quince años de edad era natural de El Carpio, Córdoba. Miembro de una familia de 7 hijos, de los que solo so...