viernes, 15 de febrero de 2013

Método.



Mi tercera máxima fue procurar siempre vencerme a mí mismo antes que a la fortuna, y alterar mis deseos antes que el orden del mundo, y generalmente acostumbrarme a creer que nada hay que esté enteramente en nuestro poder sino nuestros propios pensamientos , de suerte que después de haber obrado lo mejor que hemos podido, en lo tocante a las cosas exteriores, todo lo que falla en el éxito es para nosotros absolutamente imposible. 
Y esto sólo me parecía bastante para apartarme en lo porvenir de desear algo sin conseguirlo y tenerme así contento; pues como nuestra voluntad no se determina naturalmente a desear sino las cosas que nuestro entendimiento le representa en cierto modo como posibles, es claro que si todos los bienes que están fuera de nosotros los consideramos como igualmente inasequibles a nuestro poder, no sentiremos pena alguna por carecer de los que parecen debidos a nuestro nacimiento, cuando nos veamos privados de ellos sin culpa nuestra, como no la sentimos por no ser dueños de los reinos de la China o de Méjico...

Descartes era una persona con una amplia visión del ser humano, en esta tercera máxima nos muestra como muchas veces deseamos cosas que ni necesitamos, ni nos van a hacer falta; eso hace que suframos una ansiedad innecesaria.
Libros como este son necesarios en tiempos revueltos, nos hacen pensar y conducirnos por la vida.
Si los guías nos fallan, ya andamos nosotros solos, y este es un buen sistema.

Siempre me gustó El Discurso del Metodo, es el libro que más he leído  que más he regalado y que más he disfrutado, no me cansaré de recomendarle.

Tampoco me cansaré de escuchar esta música, (es de la poca que conozco, la verdad)..la conocí a través de una película y es espectacular...sobre todo a partir del minuto 2:40..



Que Fortuna os permita leer y aprender con Descartes y disfrutar de la música.

18 comentarios:

  1. Ojalá la racionalidad cartesiana nos sirviera en cualquier instancia. Lamentablemente el mundo en vez de regirse por lo necesario y util prefiere dejarse llevar por los caprichos de la libido y la emoción.

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  2. Nuestros pensamientos en rarísimas ocasiones y en muy pocos individuos están en nuestro poder; muy por el contrario: somos nosotros los que obramos entera y mansamente en su poder.

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  3. Estoy muy de acuerdo con esto:

    "de suerte que después de haber obrado lo mejor que hemos podido, en lo tocante a las cosas exteriores, todo lo que falla en el éxito es para nosotros absolutamente imposible"

    Es decir, nos corresponde una parte, el resto no está en nuestras manos.

    Buena selección de lectura y música para una tarde de viernes.

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  4. Si sólo deseasemos lo necesario...
    Toca releer, es un buen momento, sí.
    Besos.

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  5. Jo! Pues no lo he leído, pero veo que has puesto el enlace, todo un detalle, voy a ello.

    Realmente desear cosas innecesarias que además no nos van a aportar más felicidad, muchas veces sólo la satisfacción del momento de tenerla entre las manos, se ha convertido en una patología.

    Besos

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  6. y yo que estaba convencido que el discurso del método lo había escrito Cristobal Montoro.

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  7. Cóño Puigcarbó...¡no me acojones! Que ese método como que me da miedo.
    Buen libro, buen mensaje, buena música...

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  8. Miquel ¡¡¡Voto a brios!!!


    P.D: ¿en que partido milita brios?

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  9. Krapp, las sensaciones también forman parte de nuestras vidas como la razón...

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  10. Desastre, lo que has dicho es para digerirlo... es fuerte..

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  11. Angie, si los problemas tienen solucion, no te preocupes y si no la tienen tampoco...¿para que?

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  12. Nuria, este libro es grande, muy grande...

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  13. Inmagina, no soy mucho de recomendar nada, pero en este caso hago una excepcion, es fabuloso lo que encierra en sus paginas...

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Piensa como piensan los sabios, más habla como habla la gente sencilla. Aristoteles (384 AC-322 AC). Filósofo griego.