viernes, 2 de noviembre de 2012

Blancanieves nunca follará con un obrero del metal.


Se debe considerar cuán paupérrimos son los puntos de vista de los cuales emanan generalmente los llamados "programas políticos" y la forma cómo éstos son ataviados de tiempo en tiempo con ropajes nuevos. Siempre es el mismo e invariable motivo el que induce a formular nuevos programas o a modificar los existentes: la preocupación por el resultado de la próxima elección. Se reúnen comisiones que "revisan" el antiguo programa y redactan uno "nuevo", prometiendo a cada uno lo suyo. 
Al campesino, se le ofrece para su agricultura; al industrial, para su manufactura; al consumidor, facilidades de compra; los maestros de escuela recibirán aumento de sueldo; los funcionarios mejoramiento de pensiones; viudas y huérfanos gozarán de la ayuda del Estado en escala superlativa; el tráfico, será fomentado; las tarifas, experimentarán considerable reducción y hasta los impuestos quedarán poco menos que abolidos.

Apoyados en estos preparativos y puesta la confianza en Dios y en la proverbial estulticia del cuerpo electoral, inician los partidos su campaña por la llamada "renovación"...

Pasadas las elecciones, el "señor representante del pueblo", elegido por un período de cinco años, se encamina todas las mañanas al congreso y llega, por lo menos, hasta la antesala donde encuentra la lista de asistencia. Sacrificándose por el bienestar del pueblo, inscribe allí su ilustre nombre y toma, a cambio de ello, la muy merecida dieta que le corresponde como insignificante compensación por este su continuado y agobiante trabajo.

Al finalizar el cuarto año de su mandato, o también en otras horas críticas, pero especialmente cuando se aproxima la fecha de la disolución de las cortes, invade súbitamente a los señores diputados un inusitado impulso y las orugas parlamentarias salen, cual mariposas de su crisálida, para ir volando al seno del "bien querido" pueblo. De nuevo se dirigen a sus electores, les cuentan de sus labores fatigantes y del malévolo empecinamiento de los adversarios. Dada la granítica estupidez de nuestra humanidad, el éxito no debe sorprendernos. 
Guiado por su prensa y alucinado por la seducción del nuevo programa, el rebaño electoral, tanto "burgués" como "proletario", retorna al establo común para volver a elegir a sus antiguos defraudadores.

¡Nada más decepcionante que observar todo este proceso en su desnuda realidad!

La lucha política, en todos los partidos que se dicen de orientación burguesa, se reduce en verdad a la sola disputa de escaños parlamentarios, en tanto que las convicciones y los principios se echan por la borda cual sacos de lastre; los programas políticos están adaptados, por cierto, a tal estado de cosas. 

Este texto bien pudiera haberlo escrito yo, con más faltas y peor redactado claro esta, pero podía haberlo escrito yo, y como yo, muchos de los que aquí vienen.
Por eso en Grecia esta creciendo Amanecer Dorado




La Historia se repite...

El texto de arriba es parte del Mein Kampf de Adolf Hitler y bien pudiera escribirlo y firmarlo muchos de los habitantes de esta península, cansados, arruinados y desencantados de la clase política.
Estoy convencido que no es el hambre, ni la necesidad, lo que conduce al fascismo; es el desencanto, es la realidad de este texto, lo que condujo a Hitler al poder y a Europa a la debacle, aunque ahora nuestra casta política (similar a la de aquellos años) intente ocultarlo.
Cuando las personas públicas no dicen nada, no aportan nada y solo se les ve su cara más vergonzante, su falta de ejemplo, su corrupción  es cuando los iluminados aparecen y deslumbran a los cansados y asqueados.
Sus uniformes, sus banderas, sus actos colectivos les deslumbran, hacen que se vean como iguales, se sienten parte de algo, aunque al final no sea más que un desfile de banderas y una voces al viento que en nada mejoran su status quo.
Aunque al final, sigamos siendo las hormigas obreras del hormiguero nuestra labor sea medida y valorada según sus criterios y Blancanieves seguira follando con el príncipe (o primer ministro revolucionario) y no con un obrero del metal,. y esa Justicia Social prometida por los fascistas, sea otra salva en un mar de cañonazos...

A mi no me engañaran, aunque es muy probable que a otros muchos habitantes de esta península de Asia si lo hagan....
Lo veremos muy pronto o a lo mejor ya lo estamos viendo y miramos a otro lado o nos dejamos llevar o pensamos que la Historia no se repite o nos creemos que somos más listos que los alemanes de los años 30 o tan solo es que necesitamos un pastor para el rebaño, y somos vagos, y nos dejamos llevar, y nuestra vida es mucho más cómoda cuando no tenemos que tomar decisiones, y preferimos ver la tele que leer algo, y sabemos que si decidimos nos podemos equivocar pero no vemos que si no decidimos también nos llevamos las consecuencias malas y carecemos de los beneficios de las buenas o tan solo es porque somos estúpidos y estamos condenados a no entendernos o puede ser que la avaricia mal entendida (ande yo caliente..) nos guie o simplemente es que seamos unos gilipollas, unos lerdos, unos estúpidos...
Por eso el fascismo siempre resucita, va con nuestra forma de ser, con nuestro pasado animal, con nuestro presente inactivo, va con la etiqueta "persona"...somos previsibles, nos enseñaron de pequeños a serlo, como nos enseñaron que para follar con Blancanieves tienes que ser un príncipe...

Que Fortuna nos de voluntad.

26 comentarios:

  1. alguno aparecerá, ya hay síntomas que así lo indican.

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  2. Pues anda que si tiene que follar con un príncipe azul....ya no queda ninguno ¡¡

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  3. Siempre llegan los salvapatrias, que prometen hacer lo que nuestra inacción y comodidad no nos permiten. A mi esa perspectiva es la que más me aterroriza. Hay desencanto y derrotismo en el ambiente. Nos han convencido de que de esta no podemos salir por nosotros mismos. Y hemos bajado los brazos. Ya sabes, los enanitos buenos tenemos que currar, poco más. Decidir, luchar, follar con Blancanieves ... eso parece que preferimos delegarlo en otros, para no asumir riesgos ni responsabilidades.
    Besos.

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  4. Miquel, ya saldra alguno, que la familia es muy extensa...

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  5. Nuria, yo no quiero follar con Blancanieves, que es una cursi, a mi me pone más algunas caperucitas. Respecto a bajar los brazos, es la costumbre imperante... es norma de la casa..

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  6. No lo permita Dios…

    O quizás de ya lo mismo…quien me dice a mi que en nombre de la economía no estemos ya bajo el yugo del salva patria de turno.

    Así que si las reglas del juego se las pasan por el forro, no estemos inmerso en un genocidio de la población ¡eso si sin ruidos estridentes!

    Joder como me ponen los días triste de este Madrid.
    Salu2

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  7. Pues sí, y es raro que no haya aparecido ya algo similar. Después la gente se asustará...¿como pudo ser?. En fin, así están las cosas.
    Besos.

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  8. Entrada terrible.
    Y para tenerla muy en cuenta.
    Muy bueno el truco de iniciar con Mein Kampf y ver cuánto en común tenemos los ciudadanos de hoy, hastiados, con ese texto.
    Saludos (sin brazo en alto, de momento).

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  9. La ignorancia y la desesperación siempre han sido terreno abonado para los salva patrias y los fascismo...
    No hay borrico más borrico que el ser humano, siempre tropezando en la misma piedra:-)

    Y perdóname TEMU jajaja
    Blancanieves, no follará, punto.
    CON NADIE:-)




    Muchos besos y feliz finde.

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  10. Juan Antonio, vivimos en una dictadura, muy sutil, pero dictadura.
    Bailamos al son de otras trompetas y de otros desfiles, hay algunos que todavía se empeñan en llevar el paso y les hacen la ola, son piezas del sistema, las piezas necesarias, tu y yo..

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  11. Blue, ¿ de verdad crees que no ha aparecido? ¿quien te crees que gobierna tus dineros? ¿quien te dice cuanto y como debes gastar?

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  12. Desclasado, Este compartir ese sentimiento es el primer paso para defender más tarde conductas terribles, todo en nombre del Estado..

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  13. Maria, que hay algunas Blancanieves por ahí...que lo mismo da si son bajos o altos, con tal de que sean príncipes...

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  14. Esas no son Blancanieves TEMU... esas son Negrabarros ... o Guardabarros :-)

    Naa ni caso, cosas mías.


    Muaaaaakss

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  15. Maria, ¿ serán Blancanieves de la secreta? jajajaja

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  16. Efectivamente, siempre pasa lo mismo. Cuando las cosas se desmadran, salen a la palestra esos iluminaos que nos dicen que ellos tienen claro el camino a seguir y nos alumbran con su luz. Y, por desgracia, muchos giran en esa dirección con la esperanza de que todo sea tal cual se lo cuentan y, efectivamente, su calvario llegue a buen fin.
    Es siempre igual.
    Un beso, Pater. Has ido ya a misa???

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  17. Vaya tela........te noto un pelin irritado no? jejejeje, un beso burgalés ^_^

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  18. Estoy totalmente de acuerdo con tu comentario pero debo corregirte en un punto. El Pasok es el Partido Socialista Griego de Papandreu y creo que tu te refieres a Amanecer Dorado que es el partido nazi que está triunfando allá y no solo pos sus ideas aberrantes ya que además está haciendo labor de apoyo social ante el abandono de estas funciones por el propio estado helénico.
    Te pongo enlaces de la Wikipedia:
    http://es.wikipedia.org/wiki/Movimiento_Socialista_Panhel%C3%A9nico
    http://es.wikipedia.org/wiki/Amanecer_Dorado

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  19. Hola Temu, volvemos a tropezar con la misma piedra tantas veces como sea necesario, somos así. No sé que más tiene que pasar para que los ciudadanos despierten, no sé... Saludos.

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  20. Novicia, para mi la misa es lo primero, a primera hora de la mañana, y después a rezar...
    Respecto a mostrarnos la luz, siempre hay alguien con alguna linterna dispuesto a iluminarnos..

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  21. Estela, más que irritado, asqueado...

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  22. Krapp, una cosa primero, tienes razón al subir las imágenes me he equivocado y luego no he rectificado, el Pasok es el partido socialista y amanecer dorado el de las imágenes de las banderas, y están dando de comer a la gente por la calle, en las próximas elecciones arrasan, tiempo al tiempo..

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  23. Juan, la monotonía y la apatía están triunfando y nosotros bailamos a ese son..

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  24. Gracias Krapp, por la rectificación, un error mayúsculo.

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Piensa como piensan los sabios, más habla como habla la gente sencilla. Aristoteles (384 AC-322 AC). Filósofo griego.