miércoles, 19 de junio de 2013

Hambre en mi adolescencia, historia de una incomprensión...

Modesto que es uno y no queriendo dar la nota en ningún sitio, nací muy joven y desnudo.
A los 15 años,  ante las protestas de mi padre, mi madre decidió destetarme y allí comenzó mi vida de adulto.

Es en ese momento cuando empece a sufrir traumas, ya que desesperado y hambriento, fui primero dondelapuri  y después andélajosefina.

Ante mi petición y más que petición, suplicatoria-humillatoria-demanda-mamaria-alimentaria, mis compañeras de instituto rechazaron mis peticiones alegando mi edad, su pudor y el hecho sin importancia de que media 1,87 metros y ellas 1,60, primero una y luego la otra, me contestaron que si pensaba que eran tontas, me insultaban llamándome sátiro y  pervertido, mientras me golpeaban brutalmente con sus zapatos de tacón, ¡¡¡como me pusieron la cabeza ante mi perseverancia!!!, eran la versión femenina de Bruce Lee con  zapatos de tacón. Como consecuencia de esta defensa encarnizada (y no comprendida por mi parte) de sus pechos,  mi cráneo quedo con más baches que la carretera de Penches (un pueblo de Burgos que no tiene acceso por carretera) y posiblemente con las secuelas cerebrales que se muestran cuando me pongo a escribir.

El hambre que pasé hasta que pude comer como un adulto no se puede contar, el ansia por pillar teta hacia que mi vista, involuntariamente, persiguiera la primera teta que veía del tamaño apropiado a mis demandas. Una vez me eché encima de una agente de la Guardia Civil de turgentes senos que me paró cuando iba en bici, lo que provocó mi primera detención; la segunda fue el día del juicio cuando miraba con una hambre canina los pechos de la juez y esta se lo tomó a mal cuando se me cayo la baba,  pero eso ya es otra historia...

El apetito desmesurado hizo que mi cuerpo se estirase para vislumbrar por los escotes y ,como consecuencia, mis ojos fueron los segundos en sufrir los efectos secundarios de estos dos primeros traumas.
Tanta hambre, me provoco problemas visuales, ya que una, "lapuri", me pillaba al lado derecho de la mesa del Instituto y lajosefina (la del segundo trauma), se sentaba a mi izquierda en la cuna del saber.

Ambas, dotadas de unas glándulas mamarias del tamaño apropiado a mis deseos y necesidades más perentorias, captaban poderosamente la atención de mis ojos, y ,a pesar de sus reiteradas negativas verbales y sus marciales zapatazos físicos, era  imposible concentrarme en la sanas y doctas lecturas de Lope de Vega que imponía el maestro de Literatura, meterme en la cabeza la tabla periódica de los elementos y en clase de Fisica,  la energía potencial la calculaba en función de la  masa y peso de sus pechos y la altura a la que estos se encontraban del suelo.

Estas circunstancias, fueron la causa de mi pequeño defecto visual, estas causas unidas al hecho que no quería que me viesen mover la cabeza, porque cuando cambiaba la vista de dirección de la pizarra que tenia enfrente, los novios de ambas, -que estaban detrás mio en clase-, me aplicaban una solida recomendación visual en forma de rotunda y sonora colleja cuya aplicación añadió  un color rojo perpetuo en el cuello que bien pudiera haber servido de inspiración para una capa de torero o la bandera de la URSS,  ya que tras los estiramientos para asomarme a los balcones de los escotes mi cuello era blanco fácil de estos dos celosos compañeros de estudios, que no comprendían mis necesidades...

Una adolescencia de incomprensión es lo que sufrí en mis carnes...y en mi cabeza y cuello...

Luego ya terminé los estudios y me compré mi primer piso de soltero, pero eso ya es tema para otra entrada...

Que Fortuna os sonría.








24 comentarios:

  1. Jaja Temu! Me has sorprendido, no te conocía todavía en este registro. Genial! de principio a fin, lo que me he reído...
    "no queriendo dar la nota en ningún sitio, nací muy joven y desnudo" jaja, maravilloso!
    De verdad, me ha encantado, un besazo

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  2. O sea, que todo es por los golpes que te has llevado en la cabeza, no Pater???? Ya sabía yo que en tu pasado estaba el secreto¡¡¡¡ :P
    Es broma eh?? como cuando yo dije en un post que todo lo que me pasa es por un golpe que me di en la cabeza de pequeña cuando mi padre no me recogió al saltar de un sitio....

    Besos

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  3. Pues a los quince años ya eras alto.

    Ya habían en esa época mujeres en el cuerpo de policía! no es que lo ponga en duda, es que me sorprende, no recuerdo que antes de los mossos aquí hubieran féminas guardias civiles, nacionales o eran la urbana, esas que tocan el pito para regular el tráfico jajaja y por qué te detuvieron la segunda vez? :D

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  4. ¡Qué ganas tengo que pase la crisis y vuelvas a vender muchos camiones y, por lo tanto, espacíes en poco tus entradas en el blog!.
    Coñazo....

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  5. Inmagina, pues "malegro" oye, que no todo van a ser tristezas e iniquidades...
    Un beso.

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  6. Miquel, para ti ni beso ni hostias...

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  7. Novi, los golpes, el alcohol, las drogas y la utilización continuada de mi cuerpo como objeto sexual, es lo que tiene...

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  8. o eran la urbana, esas que tocan el pito para regular el tráfico jajaja... ¡¡¡Madremiadelamorhermoso!!!, como se puede interpretar eso...Pues a los quince no se, pero a los dieciseis seguro, es mi altura actual (sino bebo mucho... jajajaja)

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  9. Toy, esta la tenia en la recamara de hace tiempo, lo que no me habia dado por publicarla...

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  10. muy bueno lo de la Guardia Civil, es de nota.

    salut

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  11. Francesc puedo prometer y prometo que mi estatura era esa en su día, más o menos, lo de la guardia civil es una cosa de contar en privado...

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  12. ¡Qué bueno eres! jajajajajaja,te veo distendido y me gusta, aunque pienso... ¿qué le pasará mi tocayo?

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  13. Tracy, que no hay trabajo y esto me resulta una terapia cojonuda..

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  14. No sé si fiarme de tus recuerdos. Siempre has dicho que medías más de 1'90 y ahora te has quedado en un modesto 1,87 o sea solo a dos centímetros de mi altura. Por lo demás está estupendo este canto risueño a la sufrida adolescencia... lobos aparte, Caperucita.
    Persevera. hijo. en esta línea y seguro alcanzarás una merecida redención.

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  15. Pues no se que decirte mi niño.
    Es que a esas edades se sufre mucho.
    Y las mozas ¡Eran tan estrechas!
    Porque vamos, un chupetón que era lo que pedías no es para tanto.
    ¿O es que además mordías?
    ¿Y esos novios tan celosos? ¡Qué poco compañerismo, qué poca empatía hacia un compañero de fatigas!
    La vida que es así de cruel.

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  16. Krapp, si he dicho que media más de 1,9 he mentido, cosa que sicha sea de paso habrá sido de forma involuntaria o fruto de confusion. Yo ya no persigo escotes, aunque dicho sea de paso las formas femeninas me son extremadamente agradables.

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  17. Malo, cuando me hablaban de la liberación sexual, yo siempre decía ¿donde? hay que joderse, que sufrimientos...

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  18. Si es que la libertad "sesuá" siempre ha sido para "otros" y ya en cuanto llegas a la edad de los metales... volvemos a empezar, todo son ganas, pero sólo ganas.

    Nota.- Edad de los metales. dícese de la edad que alcanzan los hombres cuando en su cabeza brilla la plata, en su boca el oro y 3 cuartas más abajo...recuelga plomo. :)

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  19. Malo, que yo no he llegado y ni siquiera la rozo..

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  20. Ja,ja,ja
    Cómo era aquello?...
    Ah sí, tiran más dos tetas que dos carretas!
    Qué sufrida adolescencia la tuya...
    :)
    Y oye,¿qué importancia tiene lo del 1,87 y el 1,60?
    Yo mido uno sesenta, por eso lo digo,ja,ja,ja
    Un beso.

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  21. Marinel ¿Como me cogen en brazos para darme teta? esa era la pequeña cuestión por dilucidar...

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  22. Qué cortita soy,ja,ja,ja
    No había caído!!!
    Punto importante,sí.

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  23. Importantisimo por la carga afectiva que lleva consigo... jajaja

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Piensa como piensan los sabios, más habla como habla la gente sencilla. Aristoteles (384 AC-322 AC). Filósofo griego.