Ayer se bloquean los centros mayoristas de distribución, principales impulsores del esclavismo social. Sin embargo, hoy irán los sindicalistas a comprar sus productos y ver las mejores ofertas.
¿De que sirve boicotear el sistema un día?, de nada, absolutamente para nada, es tirar salvas al aire.
Empezaremos a mejorar nuestras condiciones de vida y de salarios cuando dejemos de ser clientes de los que explotan y de los que pagan poco a sus empleados.
Que este mal visto, social y económicamente hablando, trabajar los festivos y los malos sueldos, que no les salga rentable, que no compremos donde se paga mal a los empleados o se les explota.
Nadie quiere trabajar en festivos, nadie. Sin embargo,. cuando se abre una superficie los festivos allí vamos en manada.
Si no quieres trabajar en festivos, no hagas que otros trabajen para ti, esos mismos días. Cuando se den cuenta que abrir los domingos no sea rentable, en ese mismo momento, nadie trabajará los festivos. No he visto a ningún sindicato denunciar esto.
Sinceramente creo que se pueden hacer muchas cosas aparte de montar manifestaciones cada cierto tiempo y no veo movilización y denuncia de estos hechos.
Estamos diciendo que la banca se esta haciendo con todo, sin embargo, seguimos enriqueciendoles pagando con sus tarjetas de crédito, haciéndoles participes de todos los negocios de este país, al pasar la tarjeta la banca se lleva una comisión de todas nuestras compras. No he visto a ningún sindicato, ni rojo, ni blanco movilizar para que se compre en efectivo.¿Curioso, no?.
Una fabrica deslocaliza su producción a China o a Marruecos, sin embargo no veo movilizaciones para que esa marca no venda en nuestro país, somos tan listos que siempre miramos la mejor oferta, aunque nos tiremos piedras sobre nuestro tejado.
Nos quejamos de los chinos, sin embargo sus negocios prosperan con nuestro dinero, más piedras.
Somos tan listos que preferimos comprar a sociedades anónimas que a nuestro vecino, más piedras.
La solución no esta en un gobierno u otro, la solución esta en nuestra manos, solo hay que aplicarla en la dirección correcta, tenemos las armas, empleemoslas.
Nuestras armas son nuestras compras y quizás es mejor comprar menos a gente que paga bien a sus trabajadores o a autónomos, que dejarnos la pasta en grandes superficies comprando cosas que en muchos casos son perfectamente prescindibles.
¿Acaso alguien piensa que se bajan los precios subiendo los salarios?, pues no, lo sabemos pero en nuestro afán consumista hacemos como que no lo vemos.
Un domingo de compras ¿pensamos en la cajera del supermercado? ¿pensamos en los hijos de la misma?.
Sinceramente pienso que esta entrada no va a servir para nada, pero yo practico este tipo de vida, compro a mis vecinos, compro a mis clientes, pago el pan a noventa céntimos en la panadería de mi pueblo cuando se compra más barato en grandes superficies (más barato si solo compras el pan, desde luego), compro a carniceros, a polleros, a fruteros a pequeños autónomos que se intentan ganar la vida en contra de grandes superficies que explotan al personal, gente trabajadora que de vez en cuando me devuelven con la misma moneda, comprándome una furgoneta o un pequeño camión.
Somos amigos, nos llamamos por nuestro nombre, ganamos dinero los unos con los otros, actuamos de buena fe, conocen a mis hijos y yo a los suyos, hacemos sociedad de intercambio. Nos preocupamos cuando las cosas nos van mal. Somos personas.
Claro que, entiendo que para algunos, lo que prima es la mejor oferta, somos tan inteligentes y buenos compradores....
Allá ellos, pero luego no nos quejemos de lo que pasa, somos los impulsores de ello. No miremos a nadie, nosotros somos los culpables.
¿Cómo esto ha podido ocurrir? ¿Quién es el culpable?... ...bueno, ciertamente, unos son más responsables que otros... y tendrán que rendir cuentas... pero, la verdad sea dicha... si estás buscando un culpable, sólo tienen que mirarse al espejo...
Yo sigo con mi modo de vida, que creo que es el apropiado, para mi, más rentable y más humano, a corto, medio y largo plazo.
Ya se, que hay crisis... que hay que mirar lo precios.... y demás milongas que empleamos para justificar nuestra injustificable actitud, cada uno se queda contento con lo que quiere.
Podemos ir de comparsas en este sistema o intentar cambiarlo en la medida de nuestras posibilidades, todos los días, o bien podemos, como mi hermana, activista sindical, mandarme trescientos mensajes para concienciarme, ir a la huelga, hacer manifestaciones y discursos y más tarde dejar su salario en careful o en parecidas cadenas distribuidoras, que allí se paga de puta madre y no se trabajan festivos. Claro que cuando la digo esto, se mosquea.
Que Fortuna elimine cómplices activos y nos propicie visión adecuada.
